jueves, 13 de noviembre de 2014

Jornada 2 - La crónica

C. H. Magerit [5 - 4] D. Estudiantes

Hola a todos los que estabais esperando la crónica desde hace unas semanas. Bueno, digamos que alguien prometió y luego no dispuso.

Y la verdad es que es una crónica difícil de hacer, sobre todo teniendo en cuenta que las hacemos los propios jugadores, y desde dentro de la pista con las revoluciones a tope, luego es complicado recordar. Y a lo que mi memoria llega ahora mismo... puede contener muchas erratas, así que sed benevolentes con las erratas.

La primera parte fue de ida y vuelta. Gol que metíamos, gol que nos metían. Y todos los que nos metieron fueron por errores propios. Concesiones, desajustes, marcas sueltas,... y no se olviden que defendemos once, así que nadie está libre de pecado. Aunque también hubo cosas buenas.
La primera parte nos dejó sensaciones diferentes. Por un lado, los goles. Mel en dos ocasiones (uno de revés y otro en un semifallo muy oportuno para confundir al portero y empujarla según se caía) y otro de Alberto también de revés. Por el otro, el caos general de la plantilla. No sé si la foto previa, el buen día que hacía, el público en las gradas, los pajarillos que revoloteaban o la resaca futbolística del sábado, pero algo hizo que nos empeñáramos en convertir cada buena acción en una bastante peor. Y así, con el infortunio que parecíamos buscar, en forma de gol en contra en la última jugada de la primera parte, nos fuimos a descansar.
Y debo reconocer que el descanso fue lo que debía. Al menos desde la crítica constructiva, ya que Sergio repartió todos los gritos que nos merecíamos y sin duda con criterio. Si hicieron efecto o no, no lo recuerdo del todo, pero gran parte del caos desapareció y cierto orden nos inundó.
La segunda parte pronto se encauzó con un gol de penalti corner de Davichín, raso, muy ajustado al palo izquierdo. 4-4 y toda una parte para remontar, frente a un equipo con claro cansancio por la ausencia de cambios, todo lo contrario que nosotros. Pues frente a lo que se preveía en esos momentos, todo el acierto goleador que tenemos desapareció y a pesar de controlar el partido, fuimos incapaces de llegar con peligro a la portería contraria. En esos momentos los nervios afloraron, Alberto acabó "castigado" detrás de la portería durante un ratillo, fruto de indicarle al árbitro que "pitara lo que le saliera de los cojones", y el partido parecía que acabaría en tablas.
Y ahí fue donde nuestros jugadores sacan lo mejor que llevan dentro. Un tío con una tendinitis en un hombro y otro que presumía de su deplorable estado (mentira) se permitieron el lujo de crear en el último minuto una jugada digna de Oliver y Benji. Pared por aquí pared por allá Pablo y Mel, lograron generar un penalty-stroke que nos ponía al borde de sacar adelante el partido. La decisión fue muy protestada por Estudiantes, aunque más por la acción por el minuto en el que estábamos. Muy seguro de sí mismo, Alberto lo convirtió en el gol de la victoria. Y cuando el partido parecía que había concluido, en una última jugada a lo loco del rival, en un corte providencial y su consiguiente contra, estuvimos a punto de ampliar el marcador.

Al final todos contentos por el resultado. Aunque seguimos dejando muchas más dudas en nuestro juego de las que deseamos, y más después del nivel demostrado el año pasado.
En el próximo partido nos enfrentamos al líder y va a ser mucho más complicado, así que habrá que hacer las cosas mejor.







2 comentarios:

  1. Buena crónica, se agradece para los que no pudimos ir. ¡Gracias!

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  2. Muchas gracias Alber por la crónica.
    Nada que criticar.
    El próximo partido tenemos que estar más espabilado para no cometer errores básicos, y no tener que luchar por una victoria hasta el último minuto.

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